post-pre-calday y posteriores eventos

Bueno, yo iba a contar el calday, puesto que la Selia se lo perdió por algo que tomó el dia anterior. Pero creo que el resumen rápido del post anterior es suficientemente descriptivo de lo acontecido. Como siempre, la comunidad española dió la nota, y la jornada estuvo marcada por la alegría y el desparpajo que caracteriza a los ibéricos. Hubo tortillas, queso, pan con tomate y aceite, chorizo, sobrasada y sangría. Mucha sangría. También una "demo" de los sanfermines, con un japo sumitomo que más parecía un alegre cerdillo ibérico, que un feroz toro de lidia, además de una pequeña tomatina, que este año, en lugar de verse frenada por la cordura catalana del "toni bueno", se vió alimentada por la locura desenfrenada del "toni malo" (este chico vino cambiado de su última visita a Europa). Para continuar con el espíritu primaveral, esta semana tuvimos muchas actividades.




El buen tiempo ha vuelto a la bahía, y con él, las ganas de hacer miles de cosas. Esta semana la hemos tenido ocupada. El miercoles teníamos el concierto de Salif Keita en Berkeley, una sesión informativa de investigación europea en San Francisco el jueves, una barbacoa el sábado y una feria de trabajo internacional en San Francisco el domingo.

El miercoles, a Celia le entró el agobio con el trabajo de EFF, asi que por la tarde me dijo que me vendía y que pasaba de venir al concierto. Así, sin más. Eso si, me buscó una pareja para sustituirse... solo que en lugar de una rubia de bote despampanante, se aseguró de que mi pareja tenia barba y subidones de adrenalina naturales. Eso explica que el Jéctor se sentase a mi lado durante el concierto.

El concierto en sí moló bastante. Ritmos africanos acompañando a la voz aterciopelada del albino Keita y los bailes sensuales de dos morenazas que se movían con una elegancia y ritmo espectaculares. La música se prestaba a bailoteo, y los músicos animaban a los numerosos hippies a bailar. Asi que fue una cosa bastante atípica para los estándares a los que estamos acostumbrados, con la gente levantandose de sus asientos, tomando los pasillos y poniendose a bailotear en el teatro. Fue divertido. Había 3 tipos diferentes de percusionistas (batería convencional, tambores africanos estilo tambora, y Djembes), un bajo, y un guitarrista que tambien tocaba una kora (una especie de guitarra hecha con el cuerpo de una calabaza) al estilo Jimi Hendrix, tirandose por el suelo y haciendo bastante el payaso. También hubo ocasión para lo serio, con un par de temas tranquilos, y una intervención para pedir donaciones para la lucha contra la malaria (era el día mundial del tema). Al final del concierto hubo cierto desmadre, y varias personas se subieron al escenario a bailar como locos, y algunos incluso llevaban sus instrumentos para tocar alli. Muy, muy divertido.

Despues del concierto, fuimos a tomarnos unas cervecillas, y a lo tonto a lo tonto se nos hizo bastante tarde.

Siguiendo en la linea de actividades sociales, el viernes nos invitaron a una de las prestigiosas sesiones del GT-Club. El GT club fue fundado hace un par de meses por un selecto grupo de cientificos berkelianos con el principal objetivo de discutir y resolver algunos de los principales problemas del mundo... y sobre todo, para tomarse unos GinTonics (GT). Asi que ante semejante invitacion, no pudimos faltar a la puesta de sol en los jardines de la base principal del club. No estaban todos los integrantes del club, puesto que una pequeña seccion estaba jugandose la reputación en una dura partida de póker, pero tomamos algunas resoluciones importantes, como la necesidad de crear los prestigiosos premios "Kuriel" de los que ahora mismo no puedo contaros mucho (es confidencial por el momento). Cuando se terminó la ginebra, pasamos a ver cómo iba la partida de póker, y luego a casa.

Ayer, sábado, hizo un día veraniego espectacular. Y tuvimos una barbacoa en Tilden, el parque que está en la cima de las colinas, para despedirnos de Joselillo, Rosario y su niño Alvaro, unos sevillanos supergraciosos y simpáticos que conocemos desde hace poco. Se me ocurrió subir en bici con el Toni, y el Alcalde, pero la verdad es que hacía demasiado calor para hacer esas cosas (cuando subiamos, otros ciclistas bajaban y nos dijeron algo asi como "estais locos!!", lo cual, quieras que no, te lima un poco la moral. Afortunadamente, pudimos reponer líquidos, y alimentarnos con suficientes proteinas y grasas en la cima. Allí estuvimos hasta bien entrada la tarde, cuando decidimos bajar a tomar unos cafecitos a casa de Mamé. Mamé es el perfecto anfitrión. Siempre tiene cosas deliciosas en casa, y esta vez no pudo ser de otra forma, nos ofreció café irlandés, chocolates y helados (bueno, los helados los llevamos nosotros, pero el los sirvió con gran profesionalidad). Total, que fue una jornada bastante completita.

Y bueno, eso es todo por esta semana. De los saraos "profesionales" no vamos a decir gran cosa, pq no hay gran cosa que contar...